Claroscuros en las reformas de Peña Nieto
El debate y la controversia se han hecho presentes en el Senado a raíz de la entrega de la iniciativa de reforma hacendaria, presentada el pasado 8 de septiembre por el Presidente de México, ya que plantea eliminar el Impuesto Empresarial de Tasa Única (IETU) y del impuesto a los Depósitos en Efectivo (IDE), así como elevar el Impuesto Sobre la Renta (ISR) y subirlo del 30 al 32% sin imponer el IVA en alimentos y medicinas.
Dicha reforma fue ubicada dentro de cuantro ejes de acción del gobierno federal; pensión universal, seguro de desempleo, sustento financiero a la Reforma Educativa y evaluación del crecimiento económico, lo cual demandará un crecimiento en el país, por lo que el mandatario envió al Congreso de la Unión un Programa de Aceleración del Crecimiento Económico para responder al insuficiente desempleo económico.
La decisión de mantener sin IVA los alimentos y medicinas se manifestó, aclarando que los impuestos a insumos, servicios médicos, transporte urbano, libros y revistas, ya traerían "efectos adversos" en el consumo y bienestar. La propuesta también ofrece fortalecer a Pemex y disminuir el aumento a las gasolinas un 30 y 50 por ciento menos a los aplicados en el 2013.
De ser aprobada la reforma hacendaria, el gobierno federal espera un impacto fiscal del 2.9% del Producto Interno Bruto (PIB) hacia el 2018. Sin embargo, fue desaprobada por el exsecretario de Hacienda, Ernesto Cordero y la mayoría del PAN en el senado por "poner en riesgo la estabilidad macroeconómica del país".
"Si este año no hemos crecido, es porque no han sabido cómo hacerlo reiteró el exsecretario, quien defendió que durante su gestión en 2009 a 2011 en el gobierno de Felipe Calderón, México creció a una tasa de 5.4% sin necesidad de aplicar reformas estructurales. "Si se aumenta el Impuesto Sobre la Renta (ISR) del 30 al 32 por ciento a las personas físicas se generará más evasión fiscal".
Como ya había previsto el Secretario de Hacienda y Crédito Público, Luis Videgaray, las reacciones en el sector empresarial y de alimentos tampoco fueron favorables, el presidente de la Coparmex, Juan Pablo Castañón, lamentó la eliminación de la consolidación fiscal, mientras que la industria refresquera estimó un incremento del 15 al 20 por ciento en el precio de las bebidas saborizadas y sostuvo que este aumento no resolverá el problema de la obesidad, ya que con él solo se disminuirá en uno por ciento la ingesta calórica.
Con ello el dirigente nacional del Partido de la Revolución Democrática (PRD), Jesús Zambrano, afirmó que la reforma energética se tiene que constituir como un triunfo de su partido, ya que su participación en el Pacto por México fue de gran relevancia y contrastó con la postura asumida por el coordinador del PRD en el senado, Miguel Barbosa, quien pidió se reconociera que los cuatro ejes de la reforma han sido banderas perredistas, aun cuando no están en favor de los impuestos propuestos en colegiaturas, ni en la venta de bienes inmuebles, debido al estado de recesión que se vive en el país.
