Doble error humano
"Contundente" fue la palabra que utilizó el Comité para la Investigación de Incidentes Relevantes, al entregar el resultado del dictamen sobre el choque de convoyes en la estación Oceanía de la Línea 5 del Metro, el pasado 4 de mayo, cuando según los resultados, fue producido por un doble error humano.
El primer error que descartaron en conferencia de prensa, fue achacado al operador del tren 0075, quien a las 18:05 horas abandonó el andén sin seguir la indicación del Puesto Central de Control, referente a una orden de marcha por seguridad en el tramo de Valle Gómez-Terminal Aérea. Sin embargo, según el secretario ejecutivo del comité, Gerardo Requis, el conductor continuó la marcha en modo de conducción de pilotaje automático.
¿Pero quién regula la comunicación entre conductores? Es ilógico pensar que dentro del Puesto Central de Control no hubiera nadie que pudiera emitir una señal para retrasar la llegada del tren 05 a la estación Oceanía, ya que el tren 04 aún ocupaba con dos vagones la zona de andenes, pues según el dictamen, este detuvo su marcha hacia Aragón cuando una lámina de triplay se interpuso entre la vía.
Toda esta versión ha echado para atrás la postura del sindicato, que más de una vez ha denunciado la falta de mantenimiento, manifestada a lo largo de 15 años por los trabajadores, entre los que destacan los daños en la estructura de las estaciones, hundimientos de cajón de vía, filtraciones de agua y por si fuera poco o nada evidente, la falta de comunicación con el Puesto Central de Control.
Quizá lo que se pone en duda es la labor de Joel Ortega como director de este medio de transporte y su capacidad de administrar en conjunto con el Gobierno de la Ciudad de México los ingresos obtenidos del incremento del boleto, el cual se utilizaría para dar mantenimiento a trenes, como el 0075 que desde el 29 de enero contaba ya con múltiples reportes de fallas como averías en el sistema de tracción-frenado, presencia de humo y fuego y limitantes en la velocidad y que hoy fue el protagonista de una tragedia solo comparable con la de 1975.
DESPUÉS DEL NIÑO AHOGADO SE TAPA EL POZO
Dentro del dictamen técnico y después de haber sufrido un golpe político por las averías y el poco reflejo de ingresos, se incluyeron 15 recomendaciones al Sistema de Transporte Colectivo, en las que se promueve la mejoría de los procedimientos en caso de lluvia y protocolos de operación e interacción entre trenes y el Puesto Central de Control, así como la corrección de infraestructura pendiente, ¡claro!, únicamente en las estaciones hoy mencionadas, Terminal Aérea y Oceanía.