MÁS VALE TENER MAÑA, QUE FUERZA

Conocer técnicas de defensa se ha vuelto una necesidad para mujeres y niños, al ser más vulnerables en fuerza y tamaño ante ataques físicos, sexuales o intentos de secuestro.

Por ello, sin necesidad de saber pelear o ejercitarse de más, el experto en estrategias tácticas de seguridad, Carlos Villagrán, recomienda aprender movimientos limpios y rápidos que te permitan defenderte y huir ante una situación de peligro.

El niño debe aprender a reaccionar en caso de que un adulto extraño intente levantarlo a la fuerza; sin embargo, también se le debe enseñar medidas de prevención, como no hablar con extraños, nunca alejarse de la vista de sus tutores y gritar o hacer señas en caso de amenaza en un lugar público.

No obstante, cuando la situación se presenta y el menor ha sido cargado, una de las maniobras fáciles que aconseja el experto es golpear el rostro del atacante con el codo, picar y dañar sus ojos y entrelazar los pies con sus entrepiernas para impedirle caminar. Todo esto mientras pide ayuda y alerta a los adultos de su alrededor.

En cuanto a las agresiones contra mujeres, que normalmente suceden por detrás y con sometimiento en boca y cabello, Villagrán es más claro.

Nunca deben centrarse en la mano con la que las sujetan. Una forma fácil de liberarse es usar su propia cadera como palanca para fracturar el otro brazo del atacante, haciendo así que suelte la mano dominante y, con un golpe más a sus zonas vulnerables (ojos, nariz, boca, barbilla o garganta), tengan tiempo de correr.